jueves, 26 de febrero de 2009

OCTAVIA DE SKODA

La primera unidad salió de la fábrica de Mladà Bolesvav en 1959. Medio siglo después, el superventas de la firma mantiene su vigencia

EL BUQUE INSIGNIA CHECO

El Octavia, nombre del modelo más vendido de la marca Skoda, celebra su 50 aniversario a lo largo de este año. La producción del sucesor del 440, también conocido como Spartak, se inició en enero de 1959. Como novedad, cabe mencionar que fue el primer vehículo en romper con la denominación numérica de las creaciones de la firma checa. De este modo, el mencionado 440 pasó a denominarse Octavia, mientras que el 445 y el 450 fueron rebautizados como Super y Felicia respectivamente. Los cambios no se quedaron en algo tan testimonial como su nomenclatura, sino que sus creadores añadieron nuevas cotas de calidad a sus utilitarios. Más pronto que tarde, el vehículo se convirtió en una importante referencia dentro del segmento C. Destacaba por su fiabilidad, dureza y resistencia, así como por la calidad de sus materiales. El octavo modelo que se producía en la planta de Mladà Boleslav se erigió desde el momento de su lanzamiento como el emblema de la industria nacional patria. Finalmente, en 1964 cesaría su producción tras la aparición de su versión familiar. Cinco después, en 1971, se echaría el cierre definitivo a la planta de producción checa. Su nombre volvió a resurgir en 1989 al ser el primer vehículo de la firma en ser desarrollado bajo el amparo de Grupo Volkswagen, que se hizo con la propiedad de la compañía. La segunda generación de la nueva era Octavia llega en 2004 con nuevos motores y un incremento notable en equipamiento. El Octavia se ha convertido con creces en el modelo más vendido de la extinta Checoslovaquia con más de dos millones de unidades repartidas por todo el mundo, conservando buena parte de sus señas de identidad. Los orígenes de Skoda se remontan a 1890. Su creador era fabricante de bicicletas. Tras dar el salto a la producción de automóviles, sus creaciones abastecen al bando alemán durante la Segunda Guerra Mundial. Una vez finalizado el conflicto bélico pasa a formar parte de la economía centralizada de los países de órbita comunista. La apertura llega tras la revolución de Terciopelo que, unida a la caída del muro de Berlín, establecen un nuevo orden geopolítico y, para Skoda, marca el inicio de una nueva trayectoria empresarial.

PGO GAMA

El fabricante galo PGO prepara su desembarco en España de la mano de la empresa renovatio cars que comercializará sus tres modelos más destacados

TOQUE «CHIC» PARISINO

Cuentan que asistir a la producción de un vehículo de la gama PGO es como dar un salto hacia atrás de 70 años en el tiempo, cuando la fabricación de un automóvil se limitaba a una dimensión puramente artesanal. Su historia se remonta a los años ochenta cuando los hermanos Prévost, Gillies y Olivier, deciden crear en Alsacia la empresa PGO, nombre que alude a las iniciales de sus nombres y apellidos. Ya desde sus comienzos, la empresa se especializa en réplicas de coches de reconocido prestigio como el Lotus Seven, el AC Cobra o el Porsche 356 Speedters de los años 60. Durante los primeros años, la producción se hace a pequeña escala. Tras varios traslados entre Mulhouse y Montpellier, en 1998, la firma pasa a manos de dos empresarios franceses que dan un nuevo impulso a la compañía y conciben el Speedster II. El modelo presenta una estética «neo-retro» que cosecha un éxito importante en el Salón del Automóvil de París del año 2000, confirmando a PGO como un fabricante a tener en cuenta. A la apertura de sus nuevas instalaciones en un terreno de 18.000 metros cuadrados le sigue su salida a bolsa, y el posterior desarrollo de su flamante deportivo que obtiene la homologación para su producción en Europa. Sin embargo, la situación de la incipiente compañía se complica cuando PGO es demanda por Porsche, que le impide hacer réplicas de su 356. La firma de Stuttgart gana el pleito en primera instancia dejando a la compañía francesa al borde de la quiebra. Es entonces cuando un grupo kuwatí entra en escena, haciéndose con la mitad de la propiedad de la constructora, y consiguiendo que la demanda sea desestimada. El contratiempo legal hace que la firma gala se libere de antiguos corsés, optando por aportar su sello y sus propias señas de identidad a los deportivos. De este modo, la filosofía de la compañía se mueve entre la nostalgia que emana de sus vehículos y la admiración por la aplicación de la más moderna tecnología. Llega el segundo auto, Cevennes, que acopla la misma carrocería, mecánica y configuración interior que el primogénito, Speedster, pero con elementos que le aportan una mayor agresividad y un carácter mucho más deportivo. Por último, el Hemera es la novedad de PGO con la que se reafirma en la misma base que los otros dos modelos mencionados. Para sus construcciones la firma emplea un motor Peugeot de dos litros que rinde a 140 caballos de potencia con tracción trasera. Los tres coches desarrollan una velocidad cercana a los 200 kilómetros por hora, mientras que alcanzan los cien en 6,8 segundos. En su interior, destaca por presentar distintos accesorios al gusto del consumidor. De cara a su inminente desembarco en nuestro país, la empresa Renovatio Cars establecerá un descuento de 3.000 euros para los diez primeros clientes.

ASTON MARTIN V12 VANTAGE

Inspirado en el prototipo Vantage V8 presentado en 2007, llega al mercado el espectacular deportivo de Aston martin.

POTENCIA SIN LIMITE

Si bien, atendiendo a la trayectoria de la firma, no deberían de sorprendernos este tipo de construcciones, no podemos dejar de maravillarnos. En tiempos de recesión la compañía británica Aston Martin desarrolla el superdeportivo más potente y rápido de toda su gama, un logro no muy sencillo si observamos su poderoso historial. Sin complejos. Se trata del V12 Vantage que desarrolla la escalofriante cifra de 512 caballos de potencia superando al primogénito de la saga Vantage, el V8. Éste rendía a una capacidad de 385 CV, con lo que la superación de la actual construcción es más que notable. El V12 comparte motor con otro histórico de la compañía, el DBS. En relación a la tracción, ésta es posterior mientras que la transmisión es manual con seis velocidades, un mecanismo no muy habitual en este tipo de vehículos. Su espectacular mecánica se traduce en unas cifras no menos desorbitadas: apenas tarda 4,2 segundos en alcanzar los cien kilómetros por hora, mientras que la velocidad máxima se sitúa en 305. Estos desmesurados niveles se traducen, como es lógico, en un importante gasto que se fija en los 16,3 litros a los cien y en un comportamiento nada ecológico con la emisión de 388 gramos de CO2 por cada kilómetro recorrido. El Vantage V12 se basa en el prototipo del mismo nombre presentado en 2007, que ya anunciaba por aquel entonces una potencia de 600 caballos de potencia. Para vérselas con un motor de tal calado, la compañía incluye diferentes modalidades relacionadas con su gestión. La diferencia en su sistema de respuesta se adapta las pretensiones del conductor, si pasan por practicar una conducción deportiva o se transita por ámbitos urbanos o en superficies de poca adherencia. En lo concerniente al diseño, el superdeportivo evidencia claras novedades con respecto al concept. Éstas ponen un marcado énfasis en dotar a la construcción de un mayor dinamismo. Es el caso del difusor trasero donde destacan las tomas de aire del motor que se encuentran ubicadas en el capó y nuevos spoilers más agresivos. También suma novedades del mundo de la competición como la fibra de carbono en sus piezas y frenos cerámicos de serie. A su vez, la carrocería se encuentra rebajada en 15 milímetros con respecto al V8 e incluye barras estabilizadoras que incrementan su seguridad. Además estrena suspensión delantera en consonancia con el peso de su motor. Las llantas presentan un diámetro de 19 pulgadas y los neumáticos son Pirelli. El deportivo será fabricado en la sede de la compañía en la localidad británica de Gaydon. No se conoce el precio pero no pierdan el tiempo porque la producción se ha limitado a tan sólo 1.000 unidades.

jueves, 19 de febrero de 2009

MUSEO AUDI: UN GRAN PEDAZO DE HISTORIA

Los muros de la antigua fábrica de la que salió el primer horch guardan un patrimonio cultural único en honor al fundador de la firma de los aros

Ha pasado más de un siglo desde que el primer coche con el sello Horch, elaborado en la localidad alemana de Zwickau, abandonase la línea de montaje de su fábrica. Rodeado de una gran expectación, el mítico automóvil veía la luz en las calles del distrito de Ehrenfeld, en Colonia. A día de hoy, las puertas y los muros que atravesó para convertirse en la primera piedra de una leyenda viva del automóvil cobijan una incomparable colección en honor al fundador de Audi, August Horch. Ya en 1988, la fábrica de Sachsenring albergó una pequeña exposición de ejemplares de la época, aunque no terminó por cristalizar la idea de reservar un espacio permanente dedicado a la marca de los aros. Tiempo después, en un mes de septiembre del año 2004, abriría sus puertas de forma definitiva el Museo August Horch. En sus primeros 365 días de existencia recibe más de 100.000 visitas erigiéndose en la primera atracción turística de la ciudad. Su extraordinaria colección de vehículos, oriundos de la fábrica de Zwickau, se encuentra ubicada en un espacio de 2.500 metros, después de que acometieran las obras de restauración de lo que era la antigua fábrica de Audi. Su amplio espacio destaca por la claridad que entra a través de sus amplios ventanales y por los que se contempla una recreación de lo que era una calle típica de 1930. Subiendo las escaleras que nos llevan al primer piso vemos como cobra vida una de las muestras más interesantes del mundo de la automoción, con lujosos modelos de Audi y Horch como principales protagonistas. El Horch 12-28 Phaeton de 1911 se presenta ante nosotros como el vehículo más antiguo. También podremos observar bólidos de carrera como el Auto Union Type C de 1936, o el Audi Type C, con el que el mismísimo August Horch se adjudicó el Alpine Rally, una de las pruebas más competitivas y exigentes del momento. Son algunos de los iconos de una historia de éxito que pueden apreciarse en vivo y en directo. Los apasionados de la mecánica disfrutarán de un recorrido a través de los propulsores que han marcado la existencia de la marca, con joyas como el primer cuatro cilindros de 1904. A su vez, como parte de un glorioso pasado se muestra el Trabant, un ligero compacto que se convirtió en todo un símbolo de la Alemania Oriental.

martes, 17 de febrero de 2009

CHEVROLET EL CAMINO

El vehículo de Chevrolet pronto destacó por su carácter funcional debido a su capacidad de carga. Fotos: Paco Santamaría. Agradecimiento a Galería del Auto de Aranda de Duero.

UN 'COWBOY' DE LEYENDA

Una competencia bien entendida siempre desemboca en mejoras sustanciales parael conjunto de la sociedad. Un ejemplo en el sector automovilístico lo encontramos en el año 1959 cuando sale al mercado Chevy El Camino, que nace fiel a la evolución de los modelos de la marca de Chevrolet: de formas más gigantescas, luces con ojos de gato, enorme aletas de cola, a la vez que bajas carrocerías y cuidadas condiciones aerodinámicas. Características obtenidas en los años cincuenta, y que se convertirían en verdaderos clásicos. Este nuevo 'pick up' adopta la plataforma del Chevrolet Impala, aunque aunque es diseñado para combinar la comodidad de un coche voluminoso con la utilidad de un camión de carga, por lo que el diseño base en la renovada construcción pierde los asientos traseros. Las comparaciones, sin embargo, se establecen con otro modelo de la marca rival. Ford copaba el mercado desde hacía dos años con su Ranchero. Aun así, al modelo de General Motors le respaldan las ventas y en su pimer año se fabrican 22.000 unidades del Chevrolet. Sin embargo, su éxito no consigue eclipsar a la ranchera de Ford, y se decide introducir novedades. En 1968 surge la versión más larga de El Camino, que incorpora una selección de motores de alto rendimiento con una potencia máxima de 450 CV. Las 47.000 unidades de esta versión hacen morder el polvo a su competidor que pone fin a su producción en 1979. A dia de hoy, la rivalidad entre los seguidores de ambos modelos continúa y hay quien considera a El Camino, una imitación fraudulenta del Ranchero.

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jueves, 12 de febrero de 2009

FORD MUSTANG FASTBACK

Nació como alternativa a un 'envejecido' Thunderbird y no tardó en convertirse en un superventas. El día de su lanzamiento se despacharon 20.000 unidades del mítico Mustang. Fotos: Paco Santamaría

EL RUGIR DE UN PURA SANGRE

Año 1945, los soldados estadounidenses regresan a casa después de la Gran Guerra. Lo hacen tras conocer en el viejo continente auto móviles deportivos más ligeros y con un mejor comportamiento en carretera. Una influencia que llega hasta la casa Ford que lanza el Thunderbird, planteado como un roadster europeo. El nuevo modelo caló hondo entre en el gran público pero pronto comenzó a perder atractivo por lo que se hace necesario buscar sustituto con tirón en el mercado. Se crea el comité de expertos Fairlane bautizado con el nombre del hotel donde se reunían. El resultado debía ser un coche pequeño, ligero y, como modelos europeos, con sillas individuales y palancas de cambio en el piso. La denominación Mustang hace referencia a la sensación de libertad y potencia que se desea transmitir, valores que encarna a la perfección el nuevo deportivo.
Llegamos al año 1964, Tras un preciso plan de marketing que incluye el destape de "fotos no autorizadas", el nueve de marzo sale el primer Mustang de la línea de producción. Durante el día de su presentación, en la Feria de Nueva York, Ford recibe la friolera de 20.000 pedidos para adquirir el nuevo vehículo. Su precio de lanzamiento se sitúa en 2.368 dólafres. Las cifras, astronómicas para la época, nos hablan de ingresos superiores a los mil millones de dólares en los dos primeros año de su comercialización. Lejos de estancarse por el éxito inicial, Ford da otro giro al nuevo Mustang y encarga al e-corredor Carrol Shelby la creación de un nuevo modelo para hacer frente a sus rivales en el circuito profesional. Surge el Fastback como una tercera carrocería que aporta un toque más legendario y agresivo al pura sangre. En febrero de 1970 el matrimonio Ford-Shelby se disuleve. Se producen cambios obligados por la crisis del petróleo y las leyes ecológicas. Tres años más tarde llegamos al final de la primera generación del Mustang.
El modelo Fastback 1967 es considerado el más completo de la gama y su nombre responde a la caída desde el echo hasta la cola.

miércoles, 11 de febrero de 2009

LOS COCHES DEL PRESIDENTE

El majestuoso Lincoln Continental 1961, que transportaría a JFK el día de su muerte. Históricamente, las firmas americanas Lincoln y Cadillac han tenido el honor de alternar su presencia en Washington

En la memoria colectiva sigue viva la secuencia del asesinato del presidente John Fitzgerald Kennedy en la céntrica Plaza Dealey de Dallas. Corría el año 1963. JFK viajaba junto a su esposa, Jacqueline, rodeado de grandes medidas de seguridad a lomos de una limusina Lincoln Continental descapotable de 1961. A partir de ese fatídico 22 de noviembre, la seguridad de los vehículos oficiales se vio incrementada de manera significativa. Los orígenes del automóvil en la Casa Blanca nos llevan hasta finales del siglo XIX. William McKinley se convierte en el primer dirigente en desfilar en un vehículo motorizado. No obstante, es durante el mandato de su sucesor, Theodore Roosevelt, cuando el ejecutivo adquiere los primeros coches oficiales en propiedad. Históricamente, las firmas americanas Lincoln y Cadillac han tenido el honor de alternar su presencia en Washington, con construcciones repletas de todo tipo de prestaciones. En un Cadillac de 1928 repartió gestos de alegría Woodrow Wilson tras la victoria aliada en la I Guerra Mundial. Por su parte Warring Harding, en su particular momento de gloria, puso de moda, en un Packard Twin Six, el tradicional «paseíllo» tras su sesión de investidura presidencial. Posteriormente, con Franklin Roosevelt hacen aparición los primeros blindados. Dos Cadillac convertibles que medían más de seis metros de largo y pesaban cerca de 3.000 kilos de peso. El «Queen Mary» y el «Queen Elizabeth» contaban con grandes medidas de seguridad y serían utilizados por Harry Truman y Eisenhower Éste último, gran aficionado a los automóviles, inaugura su etapa dorada en el asiento posterior de un Cadillac ElDorado. En 1939, con Roosevelt, aparece la primera limusina construida de manera específica para el ejecutivo, una Lincoln V12 bautizada como «Sunshine Special». Tras el paso por la Casa Blanca de los Johnson, Nixon, Ford y Carter, que se decantaron por la firma rival de Cadillac, la filial de General Motors recupera su presencia con el polifacético Ronald Reagan. El modelo Fletwood Broughham traspasa los mandatos de Clinton y George Bush hasta llegar al penúltimo mandatario que se decanta en primera instancia por un Deville. Ahora, un «búnker sobre ruedas», denominado Cadillac One, velará por la seguridad del hombre más influyente del planeta, Barack Obama.

viernes, 6 de febrero de 2009

PEGASO Z-102


La industria automovilística española recobró el pulso con la aparición del veloz deportivo, que se convirtió rápidamente en un hito de nuestra automoción. Foto: Museo de Automoción de Salamanca e IVECO.

A LOMOS DE UN CABALLO ALADO

Posguerra en España. Nuestro país vive uno de los momentos más delicados de su historia. El Instituto Nacional de Industria trata de reflotar la economía, lastrada por enfrentamiento bélico, mediante la creación de nuevas empresas. Surgen compañías como ENASA, nacida a partir de la conocida Hipano-Suiza, de la que se traspasaron tanto sus instalaciones como su actividad industrial. En 1946 Wilfredo Pelayo Ricart asume el departamento de automoción de la incipiente empresa. Éste ingeniero nacido en Barcelona había trabajado en Alfa Romeo donde acumuló la experiencia necesaria para crear uno de los deportivos más rápidos del momento. Al mismo tiempo, sus enseñanzas sirven para revitalizar la industria con nuevos valores. Ricart crea el Pegaso Z-102, un automóvil nacido con el ambicioso propósito de poner en el mapa internacional a la mermada industria automovilística patria. El primer prototipo se presenta en el Salón de París de 1951. En una entrevista a la revista The Autocar, el ingeniero catalán describe en una frase el afán de su creación : «Somos un país pobre por lo tanto hemos de hacer joyas para los ricos». Se introducen los mayores adelantos técnicos de la época incluyendo tecnología de la más alta competición a un vehículo de carretera. Su diseño y la calidad de sus acabados, propios de un constructor de primer nivel, sorprenden al conjunto de la industria. El deportivo se fabrica con cuatro tipos de carrocerías y destaca por su capacidad motora. Llega a alcanzar los 234 kilómetros por hora, batiendo marcas de velocidad que ostentaban firmas del prestigio de Jaguar. Todos los Pegaso destacaron por su rapidez, con una potencia que discurría entre los 138 hasta los 270 caballos del motor V8 de 3,5 litros. Del ingenio de Ricart había surgido el deportivo de carretera más raudo del momento. Por contra, también era un auto apto para los pocos bolsillos adinerados de la época. Sus propietarios, tras abonar el equivalente a 15.000 dólares de entonces, esperaban largos meses hasta recibir el vehículo con tres años de garantía. Y si veloz era el vehículo, igual de fugaz fue su permanencia en la cadena de montaje de las instalaciones del barrio barcelonés de La Sagrera. Seis años después de su alumbramiento, en 1957, cesaba la producción del pura sangre, acuciado por las circunstancias políticas y económicas que atravesaba nuestro país.

SEAT IBIZA SC 1.6 105 CV

Con la llegada del modelo de tres puertas, la oferta del nuevo Ibiza queda bastante completa y atractiva en relación calidad-precio. Foto: Paco Santamaría

ESENCIA DE JUVENTUD

Fácil de conducir, con un notable comportamiento en diferentes situaciones, invitando en todo momento al máximo disfrute del piloto. Son los principales atributos que definen a uno de los superventas de la firma española en su variante «coupé» de tres puertas. El vehículo supera los cuatro metros por escasos centímetros. El mayor espacio dedicado al maletero frente a la anterior generación penaliza una mayor comodidad en las plazas traseras, situación, por otra parte, habitual en este tipo de construcciones. En el interior del habitáculo destaca la calidad de los materiales, el cuidado de los detalles y la vertiente funcional de cada elemento, a excepción de un reposabrazos demasiado voluminoso y un tanto molesto a la hora de cambiar de marchas. La esencia el vehículo destila dinamismo, algo a lo que contribuye la comodidad del asiento del piloto, más pegado al suelo y, por tanto, más deportivo. El volante se muestra muy agradable al tacto y extremadamente ligero en su conducción, adquiriendo una mayor rigidez para evitar reacciones inesperadas cuando sube la aguja en el velocímetro. Ágil, fresco, agresivo pero también seguro. Se desenvuelve con solvencia y se agarra al asfalto gracias a su metro y medio de altura. Lo probamos en circunstancias meteorológicas adversas (lluvia, nieve y fuerte viento) y en ningún momento se vio comprometida la estabilidad del vehículo. En cuanto al comportamiento de su motor, el 1.6 de gasolina de 105 caballos en versión manual se muestra correcto con un consumo moderado de 6,5 litros a los cien. En carreteras rápidas, sin embargo, no luce poderío mostrando sus carencias en rampas de moderada importancia. En ciudad y alrededores exhibe su potencial, con gran respuesta en los cambios y una gran suavidad en todo tipo de maniobras.

jueves, 5 de febrero de 2009

SSC ULTIMATE AERO EV

De mano de la firma americana Shelby Super Cars, llega uno de los proyectos más esperados. Un eléctrico con 1.000 caballos de potencia. Fotos: SSC Web

SIN FUNDIR LOS PLOMOS

El escepticismo reinante lleva a asociar la tendencia eléctrica con vehículos de escasa autonomía y poco desarrollo motor. Sin embargo, algo está cambiando en un sector que busca alternativas atractivas a los combustibles convencionales. Si nada lo remedia, el futuro, cada vez más inmediato, pasa por un «enchufe» y los diferentes constructores no quieren que este trámite energético suponga un hándicap a la hora de elaborar coches de gran atractivo y contrastada potencia._Shelby Super Cars , la empresa liderada por el hijo del mítico Carrol Shelby, responsable de las más aplaudidas preparaciones sobra la base del legendario Ford Mustang, está dispuesta a convencer a los más descreídos con la aparición de su sorprendente SSC Ultimate Aero EV. El vehículo está dotado de dos motores eléctricos AESP (All-Electric Scalable Powetrain), con refrigeración líquida, que producen la impresionante cifra de 1.000 caballos (745 kilovatios en términos eléctricos). El par se sitúa en 1.083 Nm, disponible desde la puesta en marcha del auto. En cuanto a la transmisión de la fuerza motora, de la misma se encarga un cambio automático de tres velocidades que varía de relación en poco más de dos décimas por segundo. Sus prestaciones motoras, desorbitadas para un vehículo de estas características, le permiten alcanzar los cien en un tiempo de 2,5 segundos, y desarrollar una velocidad de 335 kilómetros por hora. No acaban aquí las sorpresas que nos propone la firma americana. El Ultimate Aero EV estrena un sistema de carga inédito y que, sin duda, supone un enorme avance en comodidad y versatilidad en el empleo de vehículos eléctricos._El dispositivo denominado «Charge on The Run» (Carga sobre la marcha) permite rellenar al máximo las baterías en tan sólo diez minutos y en un enchufe de 220 voltios. Con las pilas bien puestas será capaz de ofrecer una autonomía de 320 kilómetros, una cifra nada desdeñable después de pasar sólo diez minutos conectado. Este novedoso mecanismo eléctrico también se podrá montar en vehículos de diversos tipos. La firma ha pensado en su disposición en turismos eléctricos de 200 caballos y en vehículos pesados de 1.200 CV.

miércoles, 4 de febrero de 2009

CORVETTE STINGRAY 1973

El mítico deportivo de "Chevy" exhibe su silueta sobre el asfalto del Circuito Kotarr de Tubilla del Lago (Burgos). Foto: Paco Santamaría

CORVETTE: EL QUE DESPIERTA PASIONES

Cuando en 1968 salía al mercado la tercera generación del mítico modelo de Chevrolet, las críticas no fueron las mejores, acusándole de falta de calidad en comparación con sus antecesores. Sin embargo, tras un mal inicio, poco a poco fue ganando adeptos gracias a la experiencia de una conducción inmejorable, que lo convertiría en el deportivo más potente de la época. En 1965 fue presentado como "Concept Car", destacando por una amplia amalgama de detalles futuristas, obra del ingeniero y creador David Holls. El nuevo deportivo adoptaba contornos pronunciados y curvas propias de los coches de competición, además de prominentes pasos de ruedas que guardaban semejanza con la forma de la botella de Coca Cola. Justamente por esto, se le conocería popularmente como Corvettes "con forma de botella de Coca Cola". Cuatro años después, aparece por pimera vez en las aletas delanteras el emblema Stingray, y cuya máxima novedad era un techo descapotable, inédito para su época. Los Corvettes fueron fabricados entre los años 1968 y 1982, y en cada edición hizo aportaciones originales como el encendido de alto voltaje, el catalizador o la suspensión con ballestas de material compuesto. Asimismo, introduce novedades en el paragolpes. Pero fue en 1971 cuando alcanza su mayor esplendor al montar un motor de 425 CV. Finalmente, es en 1982 cuando llega el ocaso del Stingray, del cual se llegaron a vender más de medio millón de unidades en todo el mundo.