lunes, 23 de marzo de 2009

RINSPEED ICHANGE

El iChange es el primer auto cuyo chasis se adapta al número de pasajeros que viajan. Puede tener capacidad para una sola persona o ser un coche familiar.

ALMA DE CAMALEÓN

EL carrocero suizo rinspeed ha vuelto a sorprender un año más con la llegada del Salón de Ginebra. Lo ha hecho con un prototipo adaptable que pasa de tener la configuración de un deportivo para una persona a convertirse en un coche familiar. Un ejemplo de adecuación a las necesidades del consumidor. Todo un símbolo de los cambios fundamentales que ha sufrido la industria automotriz en los últimos años. La novedad estriba en que el asiento del conductor se encuentra situado en la parte central del automóvil. Si es necesario, emergen otras dos butacas a cada lado de la plaza del piloto, un poco más retrasadas. Para acometer esta transformación tan solo es necesario pulsar un botón que hace que, de manera instantánea, se produzca la aparición de los asientos. Para facilitar esta operación y, al mismo tiempo, hacerla viable el techo y los cristales se elevan unos centímetros con respecto a la disposición que presenta cuando es ocupado por un ocupante. Éste es el principal distintivo de un prototipo que apuesta, como es normal, y casi norma en un vehículo de estas características, por una configuración motora de origen eléctrica. De hecho, dispone de un motor de 150 kW, equivalente a 204 caballos en un propulsor convencional. Las baterías que alimentan este propulsor son de iones de litio con dos sistemas de funcionamiento diferentes, uno para trayectos cortos y otro para largos recorridos. Este motor eléctrico, de origen Siemens, permite al iChange alcanzar los 220 kilómetros por hora y llegar a los cien en tan solo 4, 2 segundos. Por su parte, su autonomía es de unos 90 kilómetros con unas baterías que se pueden recargar en su totalidad en tres horas, ya sea a través de la red eléctrica o mediante unos paneles solares que se pueden enchufar al coche. La fuerza del motor es dirigida a la parte trasera del vehículo a través de una caja de cambios manual de seis velocidades, mientras que la suspensión es independiente. A pesar de las diferentes configuraciones de la construcción que dan cabida a más pasajeros incrementando su perfil familiar, el vehículo no esconde su afán deportivo, que queda patente con la exhibición de unas llantas de 17 pulgadas, montadas sobre neumáticos de marca Pirelli. El conjunto del automóvil pesa 1.050 kilos, una cifra bastante liviana gracias, en parte, a la utilización de materiales como el aluminio o la fibra de carbono que aportan una mayor ligereza. El iChange mide 4,28 metros de largo, 1,80 de ancho y 1,03 de alto. Según el fabricante suizo, estas características hacen que la resistencia aerodinámica se reduzca al mínimo garantizando una mayor estabilidad. Otro de los atractivos, con cierto aporte funcional, se encuentra en el hecho de que el techo y los cristales se elevan hacia delante, lo que permite a los pasajeros entrar en el coche sin tener que abrir las puertas. En cuanto a equipamiento, el Rinspeed incorpora un equipo de audio con 12 altavoces y un navegador que elige la ruta en la que el vehículo se va a mostrar más comedido en el consumo de energía. Las plazas traseras disponen de pantalla en los reposacabezas.

jueves, 12 de marzo de 2009

TRABANT

A pesar de su bajo precio, su discreto comportamiento ecológico y su poco agraciado diseño convirtieron al ‘trabi’ en un vehículo impopular.

EL PRIMER LOW COST DE LA HISTORIA

Hoy en día al hablar de low cost asociamos este nuevo cuño a la prestación de una serie de servicios por un precio rebajado y con una oferta más ajustada pero dentro de unos límites aceptables. En el caso del Trabant su costo competitivo, unos 10.000 marcos en la década de los 50, se erigían sobre la base de un automóvil con grandes fisuras en el plano de la calidad. El conocido como Trabi fue un auto producido por el fabricante alemán VEB Sachsering, de Sajonia. Su salida al mercado, en el año 1957, coincidió con el lanzamiento del satélite soviético Sputnik. Precisamente el nombre del coche hace referencia a este acontecimiento ya que en latín quiere decir compañero de viaje. Su tracción delantera, su carácter compacto y la suspensión independiente son detalles que sorprendieron a los más escépticos que veían innovación a buen precio. La ganga, sin embargo, venía dada por otras carencias en su fabricación. Su carrocería estaba realizada con material reciclado, concretamente con los residuos de algodón procedentes de Rusia y de las resinas de fenol de la industria de tintes de Alemania Oriental. El vehículo no disponía de comodidades ya presente en la época como luces de freno. A su vez, su disposición motora constituía una importante decepción al no incorporar el motor de cuatro tiempos que ya vestían el resto de sus rivales. Además, producía nueve veces la cantidad de hidrocarburos y cinco veces el monóxido de carbono de la media europea. Pero las circunstancias económicas y políticas del momento, con una Alemania fragmentada, tampoco invitaban a tirar la casa por la ventana. De esta manera, el Trabi era una opción viable para el bolsillo en tiempos convulsos. Para hacerse con un ejemplar había que apuntarse en una lista de espera de hasta diez años o acudir al mercado negro. No tardó en convertirse en el vehículo más común en la Alemania Oriental y en ser exportado a las repúblicas comunistas. El compacto ganó enteros al ser elegido por los irlandeses U2 para acompañar al grupo en su gira Zoo TV en 1990. Un año después, cesaba la producción del que para muchos es el peor coche de la historia.

martes, 10 de marzo de 2009

RENAULT MEGANE 1.5 DCI 105CV

El nuevo Mégane resalta por poseer unas notables cualidades para los que disfruten de lleno al volante. Foto: Paco Santamaría.

EXCELENCIA DINAMICA

Es de aplaudir la apuesta de determinados constructores que no se limitan a remedar la versión precedente del vehículo en cuestión. El nuevo Mégane introduce novedades de peso hasta el punto de transmitir la sensación de estar ente automóviles diferentes. En lo que respeta al diseño las diferencias quedan patentes con una simple ojeada. Sus dimensiones y presencia en la vía lo hacen destacar sobremanera con respecto a otros modelos. Sus líneas acentuadas y su trasera llamativa van orientadas a llamar la atención de forma poderosa. Ya en el interior, destaca la gran comodidad en la posición del conductor y el pasajero, y por presentar, pese a su configuración coupé un alto nivel de confort en las plazas traseras con habitáculo reservado para tres personas. Además deja un espacio considerable en el maletero que se fija en los 377 litros. En líneas generales, sus más de cuatro metros de longitud y su anchura cercana a los dos metros destacan por su alto nivel de aprovechamiento y por conferir al conjunto una mayor prestancia.
En relación a las sensaciones de conducción, el nuevo Mégane resalta por poseer unas notables cualidades para los que disfruten de lleno al volante. Al menos, la versión turbodiésel de 105 caballos presenta una excelente proporción en relación a su consumo con una media de cinco litros. Su comportamiento ecológico, no supera los 120 gramos de emisiones de CO2, lo dejan exento de pagar impuesto de matriculación. En diferentes ámbitos el vehículo se caracteriza por una envidiable respuesta apta para diferentes usos. Aunque no deslumbra con relación a su potencia es altamente capaz y divertido gracias a su fácil manejabilidad. En carreteras sinuosas, secundarias, y curvas cerradas donde le hemos exprimido al máximo, se agarra de forma extrema al suelo sin comprometer la estabilidad del vehículo. Un aspecto que hará las delicias de los que deseen una conducción plenamente deportiva sin asumir riesgos innecesarios. No obstante, a veces se echa de menos un comportamiento más agresivo de su motor, algo asumible por la configuración de la carrocería y su gran nivel de seguridad. Un aviso: su gran insonorización puede hacernos pensar que transitamos a menos velocidad de la real. Cuidado.

CITROËN DS

Bien acogido por familias numerosas y vendedores ambulantes, el Citroën DS también fue utilizado como unidad móvil de radio

UN TIBURÓN LEGENDARIO

Corría el año 1952. La prensa francesa se hace eco de un misterioso prototipo desarrollado por Citroën. Sólo unos pocos periodistas tenían fotografías y se habían encargado de alimentar el secretismo, lo que sirve para acrecentar su leyenda. Tres años después, en el transcurso del Salón de París de 1955 se desvela la incógnita. Nace el DS, calificado por los críticos del momento como un coche fuera de lo común. La cita parisina reunió a miles de personas llegadas para ver en exclusiva la nueva creación de la firma gala. Ese mismo día, la fábrica recibe 12.000 pedidos. Una vez más la compañía de André Citroën había creado un modelo destinado a marcar estilo tras la aparición estelar del dos caballos y el Traction. Gran culpa del éxito del nuevo vehículo recae sobre el ingeniero André Lefèvre y el escultor y dibujante Flaminio Bertonia. Ambos ponen su talento en común para realizar un coche que alcanza una armonía casi perfecta entre técnica y diseño. Desde su alumbramiento, el turismo resalta por la capacidad cautivadora de una apariencia exterior única. Por su parte, el habitáculo destaca por detalles exclusivos para la época, como la elegancia del salpicadero o la perfecta integración de los mandos que resultan accesibles sin tener que levantar las manos del volante. A su vez, destaca por una ergonomía impropia en la época que queda patente en un tirador que hace más cómoda la operación de apertura y cierre de la puerta. El vehículo también sobresalió en el plano mecánico con aspectos como la suspensión, el frenado o la dirección. Su nivel de prestaciones lleva a democratizar equipamientos hasta entonces reservados sólo a algunos vehículos de categoría superior, como la dirección asistida. El gran nivel de la construcción, con un bajo consumo, obligó a l resto de constructores a trabajar sin cesar para mejorar el nivel de prestaciones. En 1967 aparecería la modificación más llamativa del modelo. Su iluminación cambia y se gana el apodo de tiburón. El 23 de abril de 1975, millón y medio de unidades después, el DS deja de producirse. Su fama llega hasta nuestros días al ser considerado por la revista Classics and Sport Car el coche más bonito de la historia

ALFA ROMEO MITO 1.4 155 CV

El nuevo modelo de Alfa Romeo evidencia dosis de buen gusto y clase. Foto: Paco Santamaría.

ALTA PASIÓN Y ESTILO

Un simple vistazo al exterior del último modelo de la firma italiana basta para observar un toque de distinción en su diseño que, cuando menos, llama la atención e invita a perderse en su interior. Sin ser un utilitario exclusivo añade detalles de calidad de vehículos de alta gama. En la característica configuración delantera propia de Alfa y en los faros redondeados de la parte posterior estriba su principal atractivo estético. Fiel a sus señas de identidad, la diversión al volante está asegurada aunque haya detalles a tener en consideración para negarle una evaluación del todo positiva. Las carencias del poderoso 1.4 se dejan notar en el ámbito urbano. La escasa fuerza de sus dos primeras marchas provoca la necesidad de acudir a continuos acelerones que elevan el consumo de manera gravosa. Su comportamiento mejora en carretera, cuando la aguja progresa en el velocímetro, demuestra una gran suavidad y experimentamos interesantes sensaciones. A altas revoluciones, hablando de velocidades legales, el gasto se reduce traduciéndose en un gasto más proporcionado. Para aumentar su carácter deportivo añade el sistema DNA que ofece tres tipos de conducción: Normal, Dynamic y All Weather, ésta última para superficies con poca adherencia. La opción Dynamic es la que más nos ha fascinado al añadir un plus de agresividad, con aceleraciones más rápidas acompañadas de un poderoso rugido. Su mayor riesgo se encuentra en el desencanto que produce volver al mecanismo de conducción convencional. La suspensión se presenta algo dura pero, por contra, exhibe una gran estabilidad . La posición del conductor es cómoda en exceso, mientras que las dos plazas traseras no gozan de gran espacio. En equipamiento destaca su sistema de música y telefonía que se pueden manipular desde el volante.

domingo, 1 de marzo de 2009

MAYBACH ZEPPELIN

La división más lujosa de Daimler rinde homenaje a uno de sus creaciones más legendaria con un vehículo que destila altas dosis de refinamiento

ODA A LA EXCLUSIVIDAD

Apto para muy pocos bolsillos y digno protagonista de un homenaje de altos vuelos. Con este coche, la firma perteneciente a Daimler rinde tributo al modelo del mismo nombre que llegó al mercado en 1930, estableciendo una marcada diferencia con el resto de vehículos de su tiempo. El nuevo automóvil nace para marcar unos nuevos estándares de calidad basados en la máxima exclusividad, con detalles distinguidos y rebosantes de opulencia. Para desarrollar esta espectacular construcción, la alemana Maybach ha apostado por acometer una actualización de los modelos 57 y 62S, los cuales sirven de base al Zeppelin. De esta manera, los cambios comienzan con una clara superación de su capacidad motora, con la aportación de un propulsor de 12 cilindros en V de seis litros. Este poderoso desarrollo le permite exhibir una fuerza de 640 caballos y un par máximo de 1000 Nm. De este modo, el nuevo Zeppelin no sólo mantiene el nivel de sus predecesores sino que aumenta de forma considerable su potencia en 28 caballos. Aunque no se conocen las cifras de su consumo, contemplando la evolución de los vehículos de la firma, no es de extrañar que éste supere los 17 litros por cada cien kilómetros recorridos. Su comportamiento tampoco es muy ecológico que digamos con unas emisiones de 390 gramos de CO2 por kilómetro. Hay más novedades aparte de las que afectan a la mecánica del vehículo. En este sentido la berlina introduce importantes detalles en el campo del diseño. Destaca por presentar una tonalidad muy característica en el conjunto de la carrocería en combinación con dos variedades cromáticas diferentes que desembocan en un gran refinamiento estilístico. Frente al oscuro tradicional de anteriores construcciones, el Zeppelin muestra una mezcla de tonos más claros que comienzan en la parte delantera hasta desembocar a la altura de los faros traseros. Para reforzar su impacto visual, el vehículo viste otros elementos que llaman la atención como unas llantas de 20 pulgadas que incorporan radios con detalles cromados y que aportan un plus de deportividad al conjunto. A su vez, los retrovisores han sido configurados con gran cuidado estético y, también, para lograr una mayor resistencia aerodinámica. La distinción y elegancia que preside la construcción se traslada al interior del habitáculo con detalles llamados a marcar la diferencia. Los asientos de la berlina se exhiben recubiertos de una lujosa piel elaborada en California, combinada con otra segunda capa originaria de la isla italiana de Stromboli. A su vez, incorpora un tapizado con rombos bordados en los respaldos y copas de champán realizadas en plata, y en las que se han grabado el nombre del modelo. De manera opcional, Maybach ofrece la posibilidad de instalar dos monitores que dividen la zona trasera de la delante. Por último, como muestra inequívoca de opulencia, ofrece un dispositivo que permite perfumar el vehículo. Se trata de un mecanismo situado en las tomas de ventilación traseras que se convierte en vaporizador. Eso sí, el olor no penetra en la ropa de los pasajeros. La elección de esta fragancia tiene un valor añadido de 3.950 euros sobre el precio final del vehículo.

FORD KA

El turismo exhibe dosis de solvencia en ciudad y carretera, cumpliendo las expectativas de ser un aliado en el entramado urbano. Foto: Paco Santamaría

EL PEQUEÑO SE CRECE

La valoración de un automóvil ha de hacerse en función de los objetivos que se persiguen y de la utilidad que se va dar al mismo. También, como no, ha de tenerse en cuenta la evolución del modelo respecto a sus predecesores y la cuantía de la inversión. En este sentido, el nuevo Ford Ka cumple con las expectativas de convertirse en un excelente aliado de todo conductor en el entramado urbano. Además, en lo referente a su aspecto exterior, basta detenerse un instante para comprobar el salto de calidad en su apariencia física respecto a la anterior generación del modelo. La versión en gasolina del 69 caballos responde con agilidad y se desenvuelve con una soltura insultante además de transmitir unas sensaciones muy agradables, erigiéndose como un vehículo fácil de conducir en exceso. La respuesta del acelerador es buena aunque evidencia ciertas carencias derivadas de la falta de fuerza. Algo por otra parte normal hablando de un motor de 69 caballos. No obstante, en carretera, el Ford Ka se muestra igual de nervioso que en el entramado urbano, exhibiendo una gran estabilidad y rindiendo a un buen nivel dentro de los márgenes legales que, finalmente, es de lo que se trata. El consumo medio se sitúa en torno a los cinco litros, un gasto que no hace sino revalorizar su inversión. El Ka mide 3,62 metros de largo, 1,66 de ancho y 1,51 de alto. Unas dimensiones que penalizan la comodidad en su interior, sobre todo en la parte trasera. Algo común, por otra parte, en este tipo de vehículos. Los ocupantes de la plazas delanteras disfrutan de una gran comodidad y espacio. Además, el Ka exhibe un gran maletero con una capacidad de carga de 224 litros, bastante superior a otros vehículos de su segmento. En su interior destaca por la calidad de los acabados, siempre en relación a su precio. Además el volante es muy sensible al tacto haciendo muy agradable la conducción. El equipamiento es importante con Radio CD y MP3, en ambos casos manipulables desde el volante. La sensación que transmite el Ka, a través de su gran estabilidad y la suavidad de su suspensión es la de estar conduciendo un coche de un tamaño superior, aunque con grandes ventajas a la hora de encontrar aparcamiento.